La Panthère, la icónica fragancia floral felina de la Maison, amplía sus variaciones olfativas con La Panthère Elixir. Refugiarse en el pelaje suave y embriagador de un felino y entregarse a la calidez del almizcle leonado combinado con un jazmín aterciopelado: esta es la nueva sensación que Mathilde Laurent, perfumista de la Maison, ha querido recrear con este nuevo acorde. Esta estela adictiva con inflexiones de lirio, ámbar y jazmín matiza las facetas del eau de parfum original.
Creada en 2014, la estela de La Panthère reinterpreta el acorde de chipre al combinarlo con un floral felino inédito. Así, se inscribe en la visión contemporánea y libre de Mathilde Laurent del mundo de la perfumería. ¿Por qué la pantera? Porque es el emblema de Cartier, un símbolo de su creación desde 1914, cuando hizo su aparición en un reloj con motivo de manchas. Fue el comienzo del vínculo entre la pantera y la Maison, que se intensificó bajo el impulso de Jeanne Toussaint, Directora creativa desde 1933. En 1948, esta visionaria dio forma al felino imaginándolo en tres dimensiones.
Con La Panthère Elixir, Mathilde Laurent continúa su labor y se acerca lo máximo posible al pelaje y a la suavidad del animal, como si se tratase de la caricia de un terciopelo cálido, vivo e intenso. “Toda mujer posee una faceta felina y toda flor alberga notas animales en su corazón”, comenta Mathilde Laurent. En términos de diseño, Cartier realza las líneas curvas de la cabeza de la pantera para revelar un diseño orgánico y primitivo. Este frasco recargable suaviza el dinamismo de las líneas y fortalece el vínculo con el emblema joyero de la Maison.
EL ICÓNICO FRASCO DE LA PANTHÈRE
Creada en 2014, la estela de La Panthère se atreve a reinterpretar el mítico chipre al combinarlo con un acorde floral felino inédito. Una estela para la que Cartier diseña un frasco tallado desde el interior: la cabeza esculpida mediante ángulos rectos, con mandíbula cuadrada y ojo biselado. Es el reflejo de la pantera y de su feminidad aterciopelada y sensual, de su huella hipnótica. Nueve años más tarde, con una estela que permanece intacta, el icónico frasco revela una apariencia más depurada y un enfoque más responsable que lo erigen en emblema. Un cambio de imagen sutil a favor de un diseño más ligero que limita el impacto medioambiental.
¿Cómo? En primer lugar, reduciendo drásticamente el peso del cristal en un 50 %. Y, a continuación, reduciendo significativamente el plástico de la tapa en un 70 % para utilizar aluminio, un material reciclable en un 94 %. ¿Con qué objetivo? Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Un objetivo alcanzado en un 48 % con el nuevo frasco de 100 ml y su recarga de 200 ml, en comparación con tres frascos antiguos de 100 ml. Además, la búsqueda de lo natural ha sido determinante para optar por el uso de alcohol 100 % vegetal.
El frasco de La Panthère, que se puede recargar, marca el inicio de un enfoque responsable iniciado en 2021 con la colección Rivières de Cartier y prolongado por Pasha de Cartier destinado a abarcar todos los perfumes emblemáticos de la Maison hasta 2025.
En términos de diseño, Cartier realza las líneas curvas de la cabeza de pantera para revelar un diseño más orgánico y primitivo. Fiel al encanto de su versión original, esta nueva interpretación suaviza el dinamismo de las líneas y fortalece el vínculo con el emblema joyero de la Maison. Visita la boutique Cartier en Multiplaza para conocer más de esta colección.
Mathilde Laurent, parfumeuse maison de chez Cartier
